El desafío del Gobierno con el dólar, según uno de los economistas más escuchados

El presidente de BYMA destacó el cambio de lógica monetaria del Gobierno y explicó por qué la política de flotaciónpuede marcar un punto de inflexión

29/04/2025 – 13:23hs

A tres semanas del levantamiento del cepo cambiario, el mercado continúa adaptándose al nuevo régimen de flotación administrada implementado por el Gobierno de Javier Milei. Con un dólar oficial que oscila entre los $1.000 y $1.400, y un tipo de cambio libre que comienza a converger, Claudio Zuchovicki, flamante presidente de Bolsas y Mercados Argentinos (BYMA), analizó el impacto de la nueva política monetaria y lanzó una advertencia clave: «El precio (del dólar) condiciona nuestras opiniones, pero eso tiene que cambiar».

El economista y analista financiero destacó que, por primera vez en años, el dólar comienza a funcionar como una variable más dentro del sistema económico, y no como una ancla emocional o un termómetro del humor social. «Nuestra batalla cultural contra nosotros mismos tiene que ver con este ciclo del dólar como una marca de estado de ánimo», explicó.

El nuevo rol del peso en un esquema flotante

Zuchovicki subrayó que el eje del nuevo modelo es la administración de la base monetaria. «Lo que se administra no es el precio del dólar, sino la cantidad de pesos que circulan», afirmó. Y ejemplificó: «Si todos van con pesos a comprar dólares y hay quien los quiera vender, te dolarizás. Pero al otro día necesitás vender esos dólares para pagar expensas o sueldos. Así funciona ahora».

Además, recordó que la banda cambiaria se ajustará mensualmente: el piso bajará un 1% y el techo subirá en el mismo porcentaje. «La banda se va ensanchando hasta que te acostumbres a vivir flotando. No necesitás seguir el dólar todos los días. Es una variable más», remarcó.

Zuchovicki también analizó los efectos de la inflación y cómo la pérdida de poder adquisitivo no solo restringe la compra de dólares, sino también de bienes esenciales. «Cuando sube el dólar, suben la carne, la leche, la ropa. Lo que no entendemos es que no se trata solo de no poder comprar dólares. Es que no alcanza para nada», señaló.

Sin embargo, enfatizó que se está produciendo una transformación más profunda: «Hasta ahora, el poder lo tenía quien tenía la mercadería. Vos querías sacarte los pesos de encima y el comerciante no vendía porque no sabía si iba a poder reponer. Hoy hay sobrestock. El poder lo tiene el consumidor», sostuvo.

El desafío que viene: reformas estructurales

En diálogo con El Observador, y con la mirada puesta en el mediano plazo, el presidente de BYMA fue enfático: «Argentina tiene que discutir impuestos, cargas laborales, aportes, intermediación. Hay que hablar de reformas estructurales que nos hagan más competitivos».

Según Zuchovicki, el nuevo esquema cambiario abre una ventana de oportunidad. Pero aprovecharla dependerá de que el país avance en cambios de fondo. «El modelo necesita estabilidad, pero también incentivos para producir, exportar e invertir. No alcanza solo con ordenar la moneda», concluyó.