Llegó el alivio judicial para el enfermero del barrio Zatti
Vive situaciones violentas con una familiar.
Lo escucharán en Laprida y 25 de Mayo.
Luego del desesperado y público pedido de ayuda, el enfermero del barrio Zatti encontró un poco de alivio en la Justicia. Este último miércoles, tanto el trabajador como su sobrina fueron notificados por la Jusdticia y deberán presentarse en Laprida y 25 de Mayo.
En una conversación con NoticiasNet, el enfermero reveló que “hoy (por ayer) me notificaron a mí y a mi sobrina (la violenta), tengo que ir a Tribunales por el tema de exclusión, veremos cómo sale todo, por suerte me escucharon, esperemos que todo salga bien”. Esta convocatoria se convierte en una esperanza tangible para quien ha soportado una tormenta de adversidades en los últimos tiempos.
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Sobre la reacción de su sobrina con quien mantiene diferencias al recibir la notificación, el trabajador comentó: “se la vio muy enojada, pero no quedaba otra, por todas las cosas que hizo”. Esta reacción era esperada, dada la serie de incidentes que han jalonado las últimas semanas y que se intensificaron dramáticamente.
El llamado fue realizado por el Equipo Técnico Interdisciplinario 1, instalado en Laprida 292, en la esquina con 25 de Mayo, en la ciudad de Viedma. Este equipo se encarga de abordar situaciones como la que enfrenta el trabajador de la salud en la actualidad.
Es crucial recordar que estos problemas no nacieron de la noche a la mañana; comenzaron el año pasado y fueron de mal en peor, hasta estallar en las últimas semanas. El punto de ruptura llegó cuando al enfermero le arrojaron tierra, presuntamente del cementerio, encima de la mesa. Como si eso no bastara, la tormenta continuó con piedrazos en el techo y burlas constantes en el momento en que llamaba a la Policía para pedir ayuda.
Cansado y al borde de sus límites emocionales, el enfermero decidió llevar su angustia al dominio público, con la esperanza de que la Justicia interviniera, sobre todo luego de ratificar que es él quien paga todos los servicios y mantiene la vivienda familiar. Esta intervención judicial le da un rayo de esperanza en medio de la tormenta, con la expectativa de que finalmente se hará justicia.
