Fuerzas rusas divulgan las primeras imágenes de un tanque M1A1 SA Abrams ucraniano dañado en combate
Por primera vez han salido a la luz imágenes de un tanque M1A1 SA ucraniano dañado en combate. Luego de haber sido incorporados al Ejército de Ucrania en octubre del 2023, los tanques de fabricación norteamericana entraron en acción en las últimas semanas, más precisamente en el frente en torno a la ciudad de Avdiivka.
Días atrás se pudo apreciar en redes sociales una mayor viralización de imágenes y videos de los Abrams ucranianos operando en el frente oriental, particularmente en puntos próximos a Avdiivka, ciudad que fue recientemente capturada por las fuerzas rusas luego de un desordenado repliegue ucraniano. Rusia continúa manteniendo presión en los distintos poblados aledaños con la intención de quebrar las defensas locales y obligar un repliegue generalizado de los ucranianos.
En una de las imágenes se aprecia al M1A1 SA Abrams con fuego en la parte posterior de su torre, por lo que se podría especular que el blindado fue alcanzado por un drone en el compartimiento de almacenamiento de munición, una de las principales responsables en la pérdida de vehículos de combate para ambos bandos.
A diferencia de los modelos soviéticos y rusos, el diseño del Abrams fue optimizado para brindar una mayor protección a la tripulación ante la deflagración de su munición, habiendo adoptado diversas soluciones a los fines de evitar las masivas explosiones que suelen verse en los tanques rusos. Este es el caso del compartimiento de munición en la parte posterior de la torre, así como portones blindados diseñados para disipar una deflagración hacia el exterior.
Como resulta conocido, muchos de los tanques rusos cuentan con un carrusel de munición interno, debajo de la torre, configuración que ha demostrado ser fatal ya que ante la penetración de una carga HEAT, se suele producir una explosión por simpatía que resulta en la completa destrucción del blindado y, en algunas ocasiones, en la pérdida de la tripulación.
El daño, y posiblemente una segura destrucción o captura de un tanque M1A1 Abrams, se da en un contexto donde las fuerzas ucranianas están empeñando la gran mayoría de sus medios disponibles con el objetivo de desgastar y ralentizar lo máximo posible el ya lento avance ruso en los distintos frentes.
Y así como sucedió con otros sistemas occidentales, o en el caso ruso con sus más modernos blindados o medios de artillería, entre otros, a esta altura del conflicto no debería resultar para nada extraño ver la destrucción o captura del material empeñado en combate.
Sin embargo, la particularidad del caso ucraniano con la pérdida de material occidental, particularmente de vehículos blindados como tanques, VCI y piezas autopropulsadas, es que tiene un mayor impacto debido a que en muchos casos las cantidades son mínimas. Vale recordar que EE.UU. transfirió a Ucrania 31 tanques M1A1 Abrams, número suficiente para equipar un solo regimiento.
Con las fuerzas rusas sosteniendo sus avances en el frente oriental, es posible se sigamos viendo a los Abrams ucranianos en combate, así como un incremento en vehículos dañados, destruidos o capturados.
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